Averías de gas natural: ¿Qué tipos existen y cómo solucionarlas?

13/10/2023

En las últimas décadas, el gas natural se ha consolidado como uno de los pilares fundamentales en la vida de muchas familias, proporcionando calefacción y energía para el hogar. Pero, como todo sistema, puede presentar fallos que entorpezcan el día a día.

¿Alguna vez has experimentado una interrupción en el servicio de gas? ¿Has notado que tu caldera no funcionaba de la misma forma? O, incluso, ¿has dejado de tener agua caliente y no sabías por dónde empezar para solucionarlo? Si la respuesta es sí, es posible que te hayas enfrentado a una avería de gas natural.

Para evitar que esto vuelva a suceder y asegurarnos que tienes todas las herramientas necesarias para poder enfrentarte a cualquier situación con tu caldera de gas, en este artículo, desde Podo analizaremos las averías más habituales junto con las soluciones necesarias para que puedas enfrentarlas de forma segura y eficaz.

Resumen:

¿Cómo actuar en caso de detectar un escape de gas?

Antes de pasar al análisis de dichas averías, es importante que sepas cómo debes actuar en caso de sospechar que hay un escape de gas en tu hogar. En estos casos, lo más importante es actuar con rapidez y seguir un protocolo de seguridad:

Abre todas las puertas y ventanas para que, de esta forma, el gas se disperse y se reduzca el riesgo de acumulación de gas.
No enciendas ningún aparato eléctrico, lámparas y, mucho menos, cigarrillos. Cualquier tipo de chispa puede provocar un incendio o una explosción si el gas se ha acumulado.
Si conoces el procedimiento, cierra la llave de paso del gas natural. En caso de que no lo conozcas, es mejor que no intentes manipular ninguna parte de la instalación.
Por último, sal del edificio y llama a tu compañía de gas. Infórmales de la situación y sigue sus instrucciones, ellos te ayudarán a solventarlo. Por supuesto, si consideras que el riesgo es alto, no dudes en avisar a los servicios de emergencias.

¿Qué es una avería de gas natural?

Entendemos por avería de gas natural cualquier anomalía o fallo que se produzca en el sistema de distribución o uso de gas en nuestros hogares. Estas interrupciones o mal funcionamiento pueden ser causadas por múltiples razones, desde problemas técnicos en las instalaciones, tales como fallos en los equipos que lo utilizan, hasta interrupciones en el suministro debido a causas ajenas a nosotros.

Como es evidente, no todas las averías en un sistema de gas natural tienen la misma gravedad. Algunas pueden ser sencillas y, por tanto, fáciles de solucionar, mientras que otras pueden necesitar la intervención de profesionales especializados. Sin embargo, todas ellas tienen algo en común: un impacto directo en nuestra comodidad y en nuestra seguridad.

Por todo ello, es fundamental conocer las principales causas que pueden producir una avería en el sistema de gas natural, así como saber identificarlas y tener en mente las medidas a tomar para solucionarlas.

¿Qué tipos de averías de gas natural existen?

Las averías en los sistemas de gas natural pueden manifestarse de múltiples formas. Estas se clasifican en función de cuál sea su origen, es decir, de dónde se hayan producido, y de su naturaleza, es decir, de cuáles sean sus características. Para poder actuar rápidamente y de forma adecuada ante cualquier tipo de avería, es fundamental conocer a qué nos enfrentamos y entender cada uno de esos tipos. A continuación, te presentaremos un desglose de las averías más comunes que puede sufrir una instalación de gas natural.

Problemas con el termostato

El termostato es un dispositivo encargado de regular la temperatura deseada en el hogar, actuando como intermediario entre el sistema de calefacción y el usuario.

Uno de los problemas más comunes en los termostatos está relacionado con el cableado. Es posible que la conexión dirigida al termo no esté llegando correctamente, lo que puede deberse a una instalación eléctrica defectuosa o a un desgaste del cableado provocado por el paso del tiempo.

También es importante tener en cuenta que un mal funcionamiento del termostato no siempre es evidente, y puede manifestarse con fluctuaciones de temperatura o con la imposibilidad de alcanzar la temperatura establecida.

Si se sospecha que un termostato no está funcionando correctamente, lo primero que se debe hacer es verificar su alimentación y el estado del cableado. Para ello, si no se cuenta con los conocimientos técnicos adecuados, lo más recomendable es no intentar reparar el sistema de forma autónoma. Ya que un error podría agravar el problema o incluso comprometer la seguridad del sistema. En su lugar, se recomienda contactar con un profesional que pueda evaluar y solucionar el problema, garantizando la seguridad y el bienestar de todos en el hogar.

Averías en el circuito de la calefacción

El circuito de calefacción es una parte fundamental para mantener el confort térmico de nuestros hogares en las estaciones más frías. Sin embargo, a menudo se encuentra oculto a la vista, bien detrás de paredes o bajo el suelo, lo que puede suponer un hándicap para identificar problemas en su funcionamiento.

Lo primero que se debe saber es que existen diferentes tipos de circuitos de calefacción:

Mono-tubular para radiadores de agua: Utiliza un solo tubo para circular el agua caliente por todos los radiadores, regresando posteriormente al punto de partida.
Bitubular para radiadores de agua: Utiliza dos tubos, uno para llevar el agua caliente hacia los radiadores y otro para retornarla.
Bitubular para radiadores de agua con anillo de Tichelmann: Se trata de una configuración específica del circuito bitubular que garantiza un flujo uniforme de agua caliente en todos los radiadores.

El primer indicador de que algo no va bien en el circuito es un cambio en la eficiencia de la calefacción o una caída en la presión de la caldera. Es importante asegurarse de que el circuito siempre cuente con el nivel de agua adecuado, pues una cantidad insuficiente puede generar fallos.

Si detectas una disminución en la presión de la caldera o un funcionamiento anormal, es posible que el circuito esté perdiendo agua. En situaciones donde el circuito esté a la vista, se recomienda realizar una revisión visual para identificar posibles fugas. Sin embargo, si la instalación está oculta, es fundamental contactar con un técnico especialista en calefacción para que realice un diagnóstico y solucione el problema.

Fallos en el transformador

El transformador es un dispositivo esencial en cualquier caldera. Su función principal es la de transferir energía eléctrica de un circuito a otro para ajustar el voltaje. Este dispositivo es fundamental para el correcto encendido y funcionamiento de la caldera, y, dependiendo de su tipo, puede tener funciones específicas:

Transformador de encendido para la caldera: es el sistema encargado de activar el proceso de encendido, dando lugar a la chispa necesaria para iniciar la llama en la caldera.
Transformador de ignición para caldera: está diseñado para encender quemadores de gas de diversos tamaños o quemadores de gasóleo de talla media. Pueden contar con una o dos salidas de alta tensión, en el caso de los segundos, suelen ser utilizados en quemadores de gasóleo, donde el arco eléctrico salta entre dos electrodos de ignición.
Transformador de chispa de la caldera: es similar a una bujía, y su función es generar la chispa necesaria para encender la llama, permitiendo que el equipo funcione adecuadamente.

Un fallo en el transformador puede comprometer el correcto funcionamiento de la caldera, afectando su eficiencia y, por supuesto, su seguridad. Si sospechas que tu caldera tiene problemas relacionados con el transformador, lo más recomendable es contactar de inmediato con un especialista, ya que estos dispositivos requieren un conocimiento técnico para su diagnóstico y reparación.

Averías en el regulador de presión

El regulador de presión es un componente esencial en los sistemas de gas y calefacción. Su principal función es regular la presión para mantenerla en niveles adecuados que garanticen un funcionamiento óptimo y seguro del sistema.

Estas válvulas no solo son obligatorias en las instalaciones de gas, sino que también juegan un papel muy importante en los sistemas de calefacción con agua. Su labor es garantizar que el agua entre al circuito con la presión adecuada, evitando picos de sobrepresión que puedan dañar otros componentes del sistema o comprometer la seguridad del hogar.

Las averías en el regulador de presión pueden provocar fallos en el suministro, fluctuaciones inesperadas de la presión o, en el peor de los casos, daños a otros componentes del sistema que supongan averías mayores. Si detectas algún comportamiento raro en tu instalación o sospechas que el regulador puede estar fallando, es recomendable apagar el sistema y contactar a un técnico especialista de inmediato. Esto garantizará un diagnóstico preciso y una reparación efectiva y segura.

Fallos en alguna de las válvulas

Las válvulas actúan como llaves de paso, regulando el flujo de gas que circula por la instalación. Estas garantizan que el gas llegue a los electrodomésticos y sistemas de calefacción de manera controlada y segura.

Una manera sencilla de identificar si la válvula se encuentra abierta o cerrada es observando la posición de su manilla: si esta está perpendicular al tubo indica que está cerrada, mientras que si está alineada al tubo señala que está abierta.

Una válvula defectuosa podría provocar escapes, disminución en el rendimiento de los equipos o incluso interrupciones en el suministro. Por lo que si detectas que alguna de las válvulas de tu instalación no funciona correctamente o sospechas que pueda estar dañada, es fundamental actuar con precaución. Debido a que esta parte de la instalación está en contacto directo con el gas, cualquier intervención en las válvulas debe ser realizada por profesionales especializados. No se recomienda intentar repararlas o sustituirlas por cuenta propia, ya que un error podría suponer consecuencias muy graves.

¿Cómo localizar una avería de gas natural?

Lo primero que debes tener en cuenta para localizar si tu caldera de gas natural sufre algún tipo de avería, es que aunque haya casos en los que la instalación tenga un comportamiento anormal que llame tu atención, también los hay en los que se producen pequeñas averías difíciles de detectar y a las que también se debe prestar atención, ya que si no se solucionan a tiempo pueden suponer grandes fallos en el futuro. Ahí radica la importancia de realizar revisiones periódicas de la caldera de gas natural en las que se identifiquen fallos y se implementen soluciones antes de que se produzcan grandes averías.

Dicho esto, debes saber que para identificar una avería en tu caldera la mayoría de aparatos cuentan con un sistema que las detecta y las muestra, bien a través de una pantalla digital o bien a través de algún otro tipo de indicador, como puede ser una luz roja o un código de error. Esto permite que sean fáciles de identificar y solucionar. Lo más recomendable es acudir al manual de instrucciones del fabricante para conocer qué tipos de averías de gas puede sufrir tu caldera y conocer qué pasos debes seguir para solucionarlo.

¿Cómo evitar las averías de gas natural?

Aunque es inevitable que en algún momento puedan surgir fallos en cualquier sistema, hay prácticas que puedes seguir para minimizar las posibilidades de enfrentarte a una avería en tu instalación de gas natural:

Lo más recomendable es realizar revisiones a tu instalación al menos una vez al año. Estas deben ser llevadas a cabo por un profesional para identificar problemas potenciales antes de que se conviertan en grandes averías.
Familiarízate con el manual de tu caldera y los dispositivos asociados. Entender su funcionamiento y las señales de advertencia te ayudará a identificar rápidamente cualquier anomalía.
Asegura una buena ventilación en las áreas donde se encuentra la caldera y otros dispositivos relacionados con el gas. Esto previene acumulaciones peligrosas y ayuda al buen rendimiento del sistema.
Si no cuentas con el conocimiento técnico, evita intentar reparaciones o ajustes por ti mismo. Una mala intervención puede empeorar la situación y poner en riesgo tu seguridad.
Los componentes de tu sistema, como las válvulas o los reguladores, tienen una vida útil determinada. Asegúrate de reemplazarlos cuando sea necesario, según las recomendaciones del fabricante.
Asegúrate de que todos en casa conozcan las medidas básicas de seguridad y qué hacer en caso de detectar un olor a gas o enfrentarse a una posible avería.

Siguiendo estos consejos, no solo prolongarás la vida útil de tu instalación de gas natural, sino que también garantizarás un entorno seguro y libre de peligros e inconvenientes para ti y tu familia.

En Podo, además de innovar cada día para ofrecerte las mejores tarifas de luz y gas, queremos cuidar de ti para que, en caso de que sufras una avería en tu instalación, puedas solucionarla de forma fácil y rápida. Para ello, te ofrecemos nuestro servicio SOLUCIONA GAS, un servicio de mantenimiento especializado que se encarga de revisar tu caldera y de realizar el mantenimiento de tu instalación sin que tengas que preocuparte por nada. Si estás interesado y tienes alguna duda sobre su funcionamiento te invitamos a contactar con nuestro equipo de soporte, donde te ayudarán a resolver tus preguntas y a encontrar la mejor solución para ti.