Resumen:
¿Qué tipos de bombillas LED para casa he de comprar?
Primero has de fijarte en la calidad de las bombillas LED. Hay gamas más baratas, de marcas desconocidas, que a la larga salen caras porque su electrónica falla (sobre todo las que incluyen transformador) o porque su luminosidad desciende antes de lo que marca su vida útil.
Ahora bien los catálogos de bombillas LED son cada vez más extensos, así que vamos a contarte las principales características que convierten estos tipos de bombillas LED para casa en las mejores, por su calidad y eficiencia energética, entre otras cosas. Con esta breve guía, estarás más seguro a la hora de comprar los mejores tipos de bombillas LED para casa.
¿Qué tipos de bombillas podemos encontrar?
Desde que Thomas Edison patentó la bombilla de carbono en el año 1880 y se hizo su posterior renovación incluyendo un filamento de tungsteno en 1904, las bombillas incandescentes han sido las más comercializadas hasta el momento.
El problema fundamental de este tipo de lámpara es su producción lumínica, ya que emite luz y calor al mismo tiempo. De esta manera, la eficiencia de estas bombillas es inexistente debido a que se genera una energía en forma de calor que no necesitamos. Es cierto, que desde los años 20 ya se empezaron a comercializar bombillas basadas en gases inertes como las de neón, la mayor parte de las ventas eran de bombillas de filo incandescente.
Desde principio de los años 90, cuando se consiguieron perfeccionar, las bombillas de tipo LED adquirieron gran popularidad debido a su eficiencia y durabilidad, que superaba en ambos aspectos a la bombilla tradicional. Hoy en día, el mercado se lo reparten entre las bombillas tradicionales, las bombillas LED y las bombillas de bajo consumo.
Las bombillas de bajo consumo son bombillas fluorescentes compactas que funcionan de forma parecida a los fluorescentes de tubo de toda la vida, pero con la diferencia que, a parte de su bajo consumo, son frías, usan entre un 50% y un 80% menos de energía (produciendo la misma cantidad de luz), y duran más.
Más o menos, un 25% de la energía que se consume en un hogar va destinado a la iluminación y, en la actualidad, con todos los avances que ha habido, las bombillas de bajo consumo y las bombillas LED (diodo emisor de luz) cubren muy bien las necesidades de cualquier vivienda y además son ventajosas a la hora de ahorrar en tu factura de la luz.
La iluminación que menos gasta
El precio medio de las bombillas de bajo consumo está en los 3,5 EUR aproximadamente, mientras que las bombillas LED cuestan de medio 7 EUR. Sin embargo, hay que matizar que una bombilla LED dura mucho y consume muy poco. Se estima que tiene una vida que se acerca a las 70.000 horas, es decir, pueden durar hasta 50 años. Así que su precio elevado en comparación compensa a largo plazo.
Diferencias entre ambas
Lo más importante es que la gran diferencia entre las bombillas de bajo consumo y las bombillas LED es que éstas últimas no contienen ningún elemento tóxico y alcanzar el 100% del rendimiento desde que las encendemos. En definitiva, resultan más eficientes energéticamente a largo plazo y menos contaminantes; además transforman hasta el 98% de su energía en luz y sólo un 2% en calor. Por su lado, las bombillas de bajo consumo tienen que ser recicladas, con tratamiento de residuos peligrosos, algo que se desconoce en general. Su funcionamiento, además, conlleva una reducción de emisión de calor elevada.
Más desventajas
La primera es que contienen un gas con una porción pequeña de mercurio (de los 3 a los 6 mg). Esto es precisamente lo que las convierte en un residuo peligroso. De ahí que tengan que ser entregadas en puntos especiales para reciclarlas.