Seguro que alguna vez te has preguntado ¿qué es mejor la calefacción de gas o de electricidad?. En nuestro país es habitual que el gas y la electricidad convivan en el hogar. De hecho, el gas natural es el combustible con mayor protagonismo como fuente para calefacción en los hogares de España.
Tanto el gas natural como la electricidad son fuentes de energía para generar calor y, por tanto, son buenas opciones para disponer de una vivienda confortable y con una temperatura interior agradable. Escoger entre una u otra nos puede suponer un ahorro considerable mes a mes y sobre todo durante los meses de frío ya que es cuando se produce el mayor consumo. Sigue leyendo para determinar qué sistema de calefacción es más beneficioso e idóneo para tu hogar en función de sus características.
Resumen:
- ¿Cuál es el consumo medio de gas de una vivienda?
- Calefacción de gas o eléctrica
- Usos más frecuentes del gas natural
- Entonces, ¿cuál es la mejor opción para mi vivienda?
- ¿Cómo reducir la factura de gas? Consejos
- Podo tu compañía de gas y también de luz
¿Cuál es el consumo medio de gas de una vivienda?
Conocer el consumo medio es importante a la hora de escoger entre el gas y la electricidad. De hecho, es el primer paso para empezar a determinar qué opción es la más rentable para tu hogar, pero para ello debemos tener en cuenta estos factores:
- Hábitos de consumo
- Personas que residan en la vivienda
- Dimensiones de la vivienda
- Localización geográfica de la vivienda (zona de residencia)
- Eficiencia energética del hogar
- Equipamiento de gas en la casa (es decir, si la acometida de gas está realizada, ya que es muy costosa hacerla de nuevo)
Según el estudio Spahousec II del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el gasto medio en el consumo de gas natural de las viviendas con calefacción, agua caliente sanitaria y cocina a gas es de 7.921 kWh anuales. Y de 2.956 kWh anuales en viviendas con agua caliente y cocina a gas.
Calefacción de gas o eléctrica
En España existen más de 10 millones de hogares con calefacción, pero no todos utilizan el gas natural como combustible. Los sistemas de calefacción más utilizados son: calefacción eléctrica, calefacción de gas natural, calefacción por gasoil y calefacción por caldera de pellets.
Actualmente, los sistemas de calefacción más comunes en nuestro país son la calefacción de gas y la calefacción eléctrica. Escoger un tipo u otro de calefacción repercutirá directamente en el coste anual del suministro, es decir, en la factura energética de tu hogar.
A continuación, a modo de ejemplo, calculamos el gasto anual en calefacción (para los 4 sistemas anteriores) de una casa unifamiliar estándar de Zaragoza (zona continental) de 3 habitaciones, 2 cuartos de baño, salón y cocina distribuida en dos plantas y habitada por 4 personas:
Sistema de calefacciónGasto Anual (euros/año)Calefacción eléctrica1.396 euros/añoCaldera de gas natural con condensación731 euros/añoCaldera de gasóleo con condensación679 euros/añoCaldera de pellets650 euros/añoFuente: Elaboración propia.
Por ello, lo primero que tenemos que hacer antes de decantarnos por el gas o la electricidad es conocer el consumo de nuestra vivienda, haciendo hincapié a las horas donde se concentra el mayor consumo diario y conocer el tipo de instalación preestablecida en la vivienda. Estos dos factores nos ayudarán a decidir por el gas o la electricidad (aunque existan otros factores determinantes y a tener en cuenta).
Además, no podemos olvidarnos de un factor importante que debemos tener en cuenta a la hora de escoger la calefacción de gas: la zona de residencia. La zona influye directamente en el nivel de consumo, en este caso el gas. A continuación, te mostramos una tabla con la media de consumo de gas natural por zonas, según el IDAE.
ZonasCalefacciónCocinaAgua calienteContinental5.672 kWh1.087 kWh3.403 kWhMediterráneo3.372 kWh775 kWh2.756 kWhAtlántico2.789 kWh1.790 kWh2.868 kWhFuente: Elaboración propia a partir de datos del IDAE.
Usos más frecuentes del gas natural
A continuación te indicamos los usos más frecuentes del gas:
- Calefacción: En los meses de frío la calefacción representa un 45% de la factura de gas, en estos meses es muy importante asegurar que se tiene el precio del kWh más bajo posible.
- Agua caliente: La cantidad de agua caliente que se consume en una vivienda depende fundamentalmente del número de personas que residan en la vivienda. Esta representa una quinta parte del total de la factura de gas, es decir, si la factura anual total de gas fuera de 800 €, aproximadamente 200 € representarían el agua caliente que empleamos en las duchas, en lavar los platos, el fregadero u otros usos similares.
La calefacción eléctrica es más común en las zonas mediterráneas, donde debido al clima su uso es ocasional, en fechas muy concretas.
Entonces, ¿cuál es la mejor opción para mi vivienda?
La mejor opción para una familia de cuatro o más personas que residan en el norte y oeste de España es claramente el gas. Por lo general la cobertura del gas en estas zonas es excelente, ya que las viviendas tienen casi todas acometida de gas, y el equipamiento de gas es, por lo general más barato. Una instalación de gas es fácil de mantener, solo tienes que revisar tú caldera una vez al año y hacer una inspección reglamentaria cada 5 años. La revisión anual está incluida en nuestro producto de mantenimiento de gas Soluciona Gas.
Por el contrario, si resides en el sur o cerca de la costa mediterránea, y tu familia no es numerosa, lo más probable es que un sistema todo eléctrico sea más ventajoso, y si te decides a instalar una bomba de calor de aerotermia altamente eficiente combinada con paneles solares, es posible que el gasto energético neto de tu vivienda sea casi cero.
Para el resto de los casos, una familia pequeña, en el centro de España, te recomendamos que hagas un estudio específico, aunque lo más probable es que sea bastante indiferente desde el punto de vista de coste usar gas natural o electricidad.
Existen algunas excepciones que nos harían replantear la decisión de contratar el gas como combustible para la calefacción de tu hogar:
- No tener la instalación de gas realizada. Una instalación de gas nueva es muy costosa, por tanto, la opción más rentable es escoger la calefacción eléctrica con una tarifa de luz barata que se adapte a tu perfil de consumo. Aunque si vives en el norte, y usas mucho la calefacción, te recomendamos analizar seriamente la calefacción de pellets ya que es mucho más ecológica que la de gasoil, y más barata que la de electricidad.
- Segunda vivienda. Si hablamos de una segunda vivienda para pasar períodos breves y puntuales, la opción más económica es la electricidad.
¿Cómo reducir la factura de gas? Consejos
¿Cómo reducir la factura de gas? Consejos
Además de contar con el mejor precio, también puedes incorporar una serie de medidas en tus hábitos que te ayudarán a reducir el consumo y por tanto a reducir tu factura mensual.
- Ventila durante las primeras horas del día para evitar la pérdida del calor acumulado durante la noche y además también para evitar la pérdida de calor debida a la irradiación del sol. Ventila siempre antes de encender cualquier aparato que caliente el ambiente. Con 10 minutos al día es suficiente.
- Revisa la caldera de gas para asegurarte que funciona correctamente y a pleno rendimiento. Para ello, lo más recomendable es pasar una revisión anual de la misma. Con nuestro producto de mantenimiento de gas Soluciona Gas tienes incluida esta revisión y además ante cualquier avería podrás respirar tranquilo.
- Programa la calefacción para que se encienda 20 minutos antes de llegar a casa, así cuando llegues la vivienda estará caliente.
- No subas el termostato al máximo para lograr la temperatura ideal de forma rápida. Deja que la vivienda vaya cogiendo la temperatura progresivamente ya que cada grado de más supone un aumento de la factura del 7%.
- Aprovecha el calor del sol durante el día. El sol es la mayor fuente de calor conocida, por ello mantén las persianas subidas para dejar entrar su calor. Te ayudará a mantener la temperatura ambiente.
- Repasa los radiadores. Purga todos los radiadores de tu casa para expulsar el aire de los mismos y que el calor fluya mejor.
- Despeja los radiadores. No coloques ropa u otros materiales encima de los radiadores ya que este perderá eficiencia. No obstaculices la salida de calor de los mismos, pueden llegar a perder hasta el 20% de su rendimiento.
- Coloca los grifos en posición de agua fría. En la mayoría de ocasiones que abrimos el grifo no necesitamos agua caliente, no necesitamos poner en marcha el calentador de agua y si tienes el grifo colocado en posición de caliente este se encenderá de forma automática.
- Cierra las habitaciones vacías o desocupadas. Así concentrarás el calor en aquellas que sí utilizas.
Podo tu compañía de gas y también de luz
Por mucho que la balanza parezca claramente decantada por el gas, dependerá de las condiciones de la vivienda (consumo, personas, hábitos, instalación…) escoger una opción u otra depende de tu vivienda y de ti. Conoce nuestra tarifa de gas, te ayudaremos a ahorrar desde el primer día.
