La evolución del precio de la luz ha sido una constante preocupación para los hogares españoles, especialmente en los últimos años, donde los incrementos han impactado de manera significativa en el bolsillo de los consumidores.
En este artículo, vamos a hacer un repaso sobre las fluctuaciones en el precio de la electricidad. Para ello, analizaremos las causas de dichas subidas y bajadas y cómo impactan estas en tu factura mensual. Nuestro objetivo es que puedas tomar las decisiones adecuadas sobre la tarifa eléctrica que mejor se adapta a tu hogar.
Resumen:
¿Cómo se calcula el precio anual de la electricidad?
Antes de comenzar a explicar todo lo relacionado con las fluctuaciones en el precio de la electricidad, es importante comprender que los precios de la luz y el gas varían cada día debido a múltiples factores como la demanda o las condiciones meteorológicas, entre otros aspectos. Dada esta variabilidad diaria, se utiliza una media anual para tener una visión más estable y comprensible de las tendencias a lo largo del tiempo.
La media anual del precio de la luz se calcula sumando todos los precios diarios registrados durante un año y dividiendo la suma por el número total de días en el año. Dicho valor nos ofrece un promedio que refleja de forma más efectiva el coste para los consumidores a lo largo del año. Lo cual nos permite comparar cómo evolucionan los precios año tras año sin que las variaciones puntuales distorsionen el valor general.
¿Por qué sube el precio de la luz?
Las fluctuaciones en el precio de la electricidad pueden atribuirse a varios factores interconectados que impactan directamente en el coste para el consumidor final. A continuación, entramos en detalle sobre cada uno de dichos factores.
Incremento de la demanda
El precio de la electricidad sube, y, por tanto, la factura de luz, cuando aumenta el consumo por parte de los clientes, especialmente durante olas de frío o calor, que impulsan el uso de sistemas de calefacción y refrigeración.
Reducción de la energía renovable
Una menor producción de electricidad proveniente de las energías renovables, debido a condiciones como la sequía, la ausencia de viento o la falta de sol, hace que el precio de la luz aumente al tener que recurrir a fuentes de generación de energía más costosas como los combustibles fósiles, más concretamente, el carbón y las plantas de ciclo combinado; instalaciones de generación de energía que utilizan tanto turbinas de gas como turbinas de vapor para producir electricidad. En estas instalaciones, funcionan en dos etapas: primero, el gas natural se quema para generar electricidad a través de una turbina de gas; luego, el calor residual de esta primera etapa se utiliza para crear vapor que impulsa una segunda turbina de vapor. Este proceso aprovecha de manera eficiente el combustible, lo que resulta en una producción de energía más limpia y con mayores tasas de eficiencia energética en comparación con las plantas que utilizan solo turbinas de gas o de vapor
Por otro lado, también se recurre a la cogeneración, un proceso que aprovecha el calor residual de procesos industriales, como por ejemplo, la producción de artículos de limpieza, para generar electricidad. El proceso en estos casos implica que el calor que se libera durante la fabricación de productos de limpieza sea capturado y utilizado para generar vapor. Y, dicho vapor, a su vez, impulsa una turbina que produce electricidad.
Estas alternativas, aunque son eficientes, tienden a elevar el coste de la generación eléctrica comparado con las renovables, lo cual se refleja en un aumento en el precio de la luz, tal como podemos observar según datos de ESIOS, portal de Red Eléctrica de España.
Fuente: ESIOS, portal de Red Eléctrica de España
Cambios regulatorios
Las modificaciones en la legislación también pueden influir en el coste de la electricidad al cambiar las tarifas de acceso o los peajes, cuotas que los consumidores pagan por el uso de la infraestructura de redes eléctricas para transportar y distribuir la electricidad desde su lugar de generación hasta el punto de consumo.
Dependencia de los combustibles fósiles
La dependencia de combustibles fósiles, especialmente el gas natural y sus fluctuaciones de precio en el mercado internacional, así como la dependencia de suministros de países externos, puede provocar aumentos significativos.
Subida del precio de las emisiones de CO2
Las políticas ambientales diseñadas para combatir el cambio climático, incluyen medidas para reducir las emisiones de CO2, uno de los principales gases de efecto invernadero. Una de esas medidas es el sistema de comercio de derechos de emisión, que establece un coste por emitir CO2. Por tanto, las plantas de generación de energía que usan combustibles fósiles, deben comprar “permisos” para emitir CO2. Cuanto mayor es el precio de dichos permisos, mayor es el coste de generación de energía, lo cual se refleja de forma directa en el precio de la electricidad.
Todos estos factores, combinados, conforman un sistema complejo donde el precio de la electricidad se ve afectado por dinámicas de mercado, regulaciones del gobierno en el sector energético, y la interacción entre diferentes fuentes de energía. Los consumidores pueden experimentar variaciones significativas en sus facturas como resultado de estos cambios, especialmente durante los meses de mayor consumo energético.
Tendencias en el precio de la electricidad en los últimos años: 2018 – 2024
En los últimos años, el precio de la electricidad ha mostrado variaciones significativas, entre los principales aspectos a destacar encontramos:
- En enero de 2018 el precio de la tarifa PVPC se situó en 0,1206 € por kWh, en este caso el precio fue inferior a la media del año que ascendió a 0,1247 € por kWh.
- Más adelante, el mes de enero de 2019 marcó el precio más alto del año con 0,1299 €/kWh, siendo el promedio anual 0,1115 €/kWh. La subida se atribuyó al aumento del consumo y del precio de generación de energía.
- En 2020, sin embargo, el precio medio anual se registró como el precio más bajo de los últimos años, con una media anual de 0,0955 €/kWh sin impuestos, debido a la caída de demanda por la pandemia y la baja en los precios de los combustibles. El precio medio fue un 14% inferior al de 2019.
- En enero de 2021 el precio de la luz se incrementó a 0,1472 €/kWh, alcanzando los 0,1870 €/kWh con impuestos, lo que supuso un aumento significativo en la factura promedio. Sin embargo, en junio del mismo año se introdujeron las tarifas 2.0TD y 3.0TD, ajustando los precios por tramos horarios. Esto significó un aumento para quienes tenían tarifa con discriminación horaria y poco cambio para los que no la tenían.
- En marzo del año siguiente, 2022, el precio de la electricidad alcanzó un nuevo récord. Fue 6 veces superior al año anterior. El principal motivo fue la crisis en Ucrania que supuso un incremento en el coste de generación de energía. El gobierno respondió con diversas medidas económicas para mitigar el impacto, como la reducción del IVA o la prórroga del Bono Social.
- El año 2023 estuvo marcado por pequeñas fluctuaciones en el precio de la electricidad. A pesar de ello, gracias a las políticas gubernamentales se pudo mitigar en cierta forma el impacto de dichas fluctuaciones manteniendo la reducción del IVA, entre otras cosas.
- En marzo de 2024, dado que el coste de generación de energía en febrero de este año fue inferior al mínimo establecido por el Gobierno de España para mantener el IVA reducido, el porcentaje de IVA aplicable vuelve a establecerse en el 21%.
¿Qué consecuencias tiene la subida del precio de la luz en España?
La subida en el precio de la electricidad suele tener un impacto notable en la vida diaria de hogares y negocios. Cuando esto se produce, son diferentes las consecuencias que los consumidores, de forma general, asumen:
- Por un lado, los usuarios que cuentan con tarifas con discriminación horaria se ven obligados a ajustar sus actividades a las horas donde el coste de la electricidad es más bajo, para aprovechar las tarifas más económicas.
- Asimismo, se produce una tendencia a disminuir la frecuencia de uso de aparatos de alto consumo energético, como lavadoras, secadoras y hornos, optimizando su uso para cuando es absolutamente necesario.
- Por otro lado, la subida de precios sirve como una medida para aumentar la conciencia sobre la importancia del ahorro energético y la eficiencia, promoviendo prácticas más sostenibles entre la población.
- Por último, la necesidad de encontrar alternativas más económicas y sostenibles genera un mayor interés y adopción de fuentes de energía renovables, como la solar fotovoltaica.
¿Qué opciones tienes ante una subida del precio de la luz?
Frente a la subida en el precio de la electricidad, existen varias estrategias que puedes adoptar para reducir su impacto en tu factura de luz. Estas opciones no solo te permitirán ahorrar mes a mes sino que también contribuirán a un uso más sostenible y eficiente de la energía en tu hogar.
Cambio de hábitos
En primer lugar, puedes comenzar ajustando tus hábitos de consumo. Para ello, entre las principales acciones que puedes adoptar destacamos:
- Escoger electrodomésticos más eficientes.
- Revisar y adecuar la potencia contratada a tus necesidades reales.
- Evalúa las ofertas disponibles en el mercado y considera cambiar a una compañía que ofrezca tarifas más competitivas o condiciones más favorables como Podo.
Instala energía fotovoltaica
La inversión en paneles solares fotovoltaicos permite generar tu propia electricidad, lo cual reduce tu dependencia de la red eléctrica y, consecuentemente, tu factura de luz. Además, con la batería virtual gratuita de Podo puedes almacenar tus excedentes solares y estos serán descontados en tu factura a precio de mercado.
Asimismo, al producir tu propia energía contribuyes activamente a la reducción de emisiones de CO2, apoyando el uso de fuentes renovables y sostenibles.
En suma, la subida del precio de la luz en España plantea desafíos significativos para hogares y negocios, pero también oportunidades para adoptar prácticas más sostenibles y eficientes. Ajustar hábitos de consumo y considerar la instalación de energía fotovoltaica son pasos efectivos hacia un futuro energético más sostenible y económicamente más rentable.
En este camino hacia la eficiencia y la sostenibilidad, contar con un aliado de confianza que ofrezca soluciones energéticas adaptadas a tus necesidades es uno de los aspectos más importantes.
En Podo, nos esforzamos por ofrecer opciones que no solo sean competitivas y transparentes, sino también adaptadas a los nuevos tiempos y necesidades de nuestros clientes. Para ello, tarifas como nuestra Flexi Uno es un ejemplo de cómo buscamos brindar tranquilidad y control sobre el consumo eléctrico, ofreciendo precios estables y predecibles que te permiten planificar tus gastos sin preocuparte por las fluctuaciones del mercado.
29 marzo, 2024