El gas natural forma parte del día a día de muchas viviendas en España, y es un suministro básico, no solo para cocinar y ducharnos, sino para mantener una temperatura agradable en nuestras casas en los días más fríos del año. Para evitar que las facturas se disparen, muchas personas buscan tarifas competitivas con las que ahorrar a final de mes y prácticas que les permitan aprovechar al máximo la energía disponible.
En Podo, además de darte opciones con las que ahorrar en la factura del gas, como nuestras tarifas de gas, te explicamos todo lo que necesitas saber para entender mejor tu factura y consejos extra para reducir el consumo de gas natural. Queremos que tomes decisiones informadas y que pagues solo por lo que realmente consumes.
Resumen:
Gas natural: cómo entender tu factura mensual
Una de las principales razones por las que los consumidores siguen reticentes a cambiar gas por otras fuentes de energía, es lo asequible que es en comparación. Tanto el valor en el mercado como las tarifas contratadas a través de las comercializadoras pueden cambiar, pero el gas sigue siendo una de las opciones más económicas.
Para poder tomar decisiones sobre tu gasto en gas natural, es importante entender bien los conceptos que aparecen en tu factura y qué implican cada uno de ellos. Así, podrás detectar oportunidades de ahorro y mejor tu consumo de energía.
Término fijo
El término fijo no es otra cosa que el importe que pagas por estar conectado/a al suministro de gas. Esta cantidad no tiene nada que ver con tu consumo, es la misma cada mes y puede variar ligeramente según la tarifa que hayas contratado con la comercializadora. Se destina a cubrir el mantenimiento de la red de distribución para que siempre tengas suministro en casa.
Término variable
El término variable sí está relacionado con el consumo de gas natural que haces al mes. Se mide en kilovatios hora (kWh) y depende completamente del uso que hagas en casa, como la calefacción, la cocina o el agua caliente. A mayor consumo, mayor importe, aunque también dependerá en cierto modo de la tarifa que hayas elegido.
El consumo de gas habitual según el tipo de vivienda
Para saber si el consumo de gas natural que haces cada mes está en la media, debes tener en cuenta tanto las características de tu vivienda como tus necesidades de consumo, por lo que esto sería solo una aproximación. El tamaño de la vivienda, la eficiencia energética de los sistemas, el aislamiento térmico y la cantidad de personas que viven en ella también son factores determinantes.
Viviendas de bajo consumo
Las viviendas de bajo consumo son aquellas con tarifa RL.1 que no superan los 5.000 kWh al año. En general, suelen ser hogares en los que el gas natural se usa de forma muy puntual, para cocinar o para encender la calefacción en zonas con un clima suave.
Viviendas de consumo medio
En las viviendas de consumo medio, el gas se usa de manera más regular para agua caliente, cocina y calefacción, por lo que suele oscilar entre los 5.000kWh y los 15.000 kWh anuales. Son viviendas con tarifa RL.2 en las que el gasto entre el término fijo y el término variable suele ser equilibrado.
Viviendas de alto consumo
Las viviendas de alto consumo corresponden a aquellas con tarifa RL.3 que van de los 15.000 kWh a los 50.000 kWh al año. Suelen estar ubicadas en áreas donde el clima es frío, haciendo un uso constante de la calefacción para mantener una temperatura agradable. También pueden ser viviendas con sistemas de agua caliente centralizada o cocinas industriales.
Tarifas de gas
Ahorra en tu factura de gas con nuestras tarifas que se adaptan a tus necesidades.
Elegir tarifaConsejos para ahorrar en tu factura de gas natural
Más allá de elegir la tarifa de gas más adecuada para ti, hay ciertos hábitos y mejoras que puedes ir implementando poco a poco en casa para ahorrar un poco más en tu factura.
1. Compara las tarifas disponibles
¿Prefieres pagar lo mismo durante todo el día, o puedes adaptar tus hábitos de consumo para aprovechar las horas más baratas o a un precio de mercado competitivo? Existen multitud de opciones competitivas, solo tendrás que compararlas para saber cuál es mejor para ti. Contar con una empresa de energía que pueda darte suministro al mejor precio y ser flexible con sus tarifas, marca una gran diferencia.
2. Ajusta tus hábitos de consumo
Para no desperdiciar energía, recuerda apagar los aparatos que se alimenten de gas cuando no los necesites, ajustar la temperatura de la calefacción y el agua caliente de casa para no excederte y aprovechar al máximo la energía, por ejemplo, cocinando varias cosas a la vez para reducir el tiempo que usas los fogones y tapar las ollas para retener el calor.
3. Invertir en mantenimiento y mejoras
Con un buen mantenimiento de tu instalación de gas natural y de los aparatos vinculados, te aseguras de que sigan funcionando como se espera. Estas revisiones puntuales no son costosas y te ayudarán a detectar cualquier fuga de gas o trabajo forzoso que esté haciendo el sistema, lo que acaba reflejado en la factura.
Además, es importante ir haciendo mejoras en tu hogar, por ejemplo, asegurando que esté bien aislada para conservar el calor y reducir el uso de calefacción. También es aconsejable renovar los aparatos más antiguos por modelos eficientes que puedan ayudarte a ahorrar a largo plazo.
Tomándote tu tiempo para elegir tu tarifa, aprendiendo a analizar tu consumo mes a mes y teniendo en cuenta los consejos que hemos mencionado antes, verás que con poco esfuerzo podrás empezar a ahorrar en la factura del gas. La clave está en ser consciente de tu consumo para poder ajustarlo y aprovechar al máximo las opciones disponibles.
En Podo, estamos aquí para resolver todas tus dudas. Te ofrecemos tarifas de gas competitivas y transparentes, con asesoramiento a medida para que puedas reducir el consumo de gas natural de tu hogar hoy mismo gracias a soluciones energéticas adaptadas a ti.
23 enero, 2025